Dícese de una relación que no es de amigos sino que roza con la relación de novios.

Son amigos pero se hablan muy cariñosamente.

Son amigos que hacen planes a futuro cuando la familia ni enterada está, alquilan departamento, sin pensar si la relación terminará en matrimonio.

Son amigos para el compromiso, pero no para las caricias.

Estos son los llamados amigos con derechos o con privilegios.

Creo que de tanto haber escuchado este término, podemos llegar a confundirnos y comenzar a pensar que es normal y que todos lo hacen, pero no te engañes, pues lo que revela una verdadera relación es el compromiso y si tu «amigo (a)» solo te quiere para un rato y no busca compromiso, entonces simplemente NO te quiere.

Porque si no vas a luchar por lo que amas, entonces no llores por lo que pierdes.

He conocido varios jóvenes que van años de amistad se tratan de manera especial y parece que se auto corresponden pero que no se deciden a comprometerse en una relación.

Quien no se comprometa contigo ahora y te dé el lugar que te mereces, no lo hará después. Las relaciones pasajeras aunque se van rápido, dejan permanentes heridas en el alma.

No te conformes con poco porque mereces MUCHO:

MUCHO respeto,

MUCHO amor,

MUCHO compromiso.

También mereces tener exclusividad como pareja. Ser el único(a) para ella (él) como también hacer de él (ella); el (la) único(a) en tu vida.

«TODO tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su HORA» (Eclesiastés 3:1)

Aprende a quemar etapas, Dios tiene un tiempo para TODO. Y Él ha señalado un tiempo para poder ser amigo(a), para poder conocer a la persona; como tener gustos y disgustos.

Recuerda que la base de una buena relación es haber tenido una linda amistad y haberla(o) conocido en todos sus ámbitos.

Cuando lo que une a una pareja es el sexo, no tardarán mucho en separarse, ya que sexo sin propósito no une sino que separa… No llena, todo lo contrario vacía. Una vez que pasa el efecto es como la droga, pues necesitarás más, pero con un alto precio: ¡Tu dignidad! ¡Tu valor!

Mi valor no esta en venta y tampoco lo debería estar el tuyo. Tienes un corazón tan valioso que no deberías permitir que algún «amigo (a)» que no tiene intenciones de comprometerse, te trate como su pareja o algo más que eso. Respétate!

El tiempo ayuda a sanar un corazón herido pero la voluntad de Dios, lo sana mucho más rápido. Decide sanar hoy y elegir lo que Dios te dice «todo tiene su tiempo»… Tiempo de amar y de separar.

«Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin» (Eclesiastés 3:11)

Respétate y evalúa tus relaciones. Si tus redes sociales y tus dispositivos móviles no son un libro abierto, entonces tus relaciones no están bien.

Toda relación que tiene un límite y una meta, tiene un propósito pero aquellas relaciones que no tienen límites y no apuntan a nada, en poco tiempo se terminan.

Aprende a ser una persona de palabra, que tu «SÍ» sea sí y tu «NO» sea no. Esto con el fin de que aprendas a tratar a tus amigos como tales y darle el privilegio a tu novio de tenerle un trato especial.

 «Haz a los demás todo lo que quieras que te hagan a ti. Esa es la esencia de todo lo que enseña la ley» (Mateo 7:12 NTV)

Si quieres ser el (la) único(a) en la vida de otra persona, haz de él (ella) la única en la tuya.

Respóndete a ti mismo la pregunta: ¿Cómo me gustaría que me amen? y de esa misma manera ama tú, si no estás en edad espera, no desesperes.

Por Wenddy Neciosup