Primero debemos saber que Dios el autor y consumador de nuestra FE. De hecho Él no solo es el autor, Él también es quien desarrolla nuestra fe. Quiero contarte que en la biblia encontramos 3 niveles de fe, que me gustaría que las analizáramos juntas;

El primero lo encontramos en MARCOS 4:37-40 NBV

37 A medio camino se desató una terrible tempestad. El viento azotaba la barca con furia y las olas amenazaban con anegarla completamente.

38 Jesús dormía en la popa, con la cabeza en una almohada. Lo despertaron y le dijeron: ―Maestro, ¿no te importa que nos estemos hundiendo?

39 Jesús se levantó, reprendió a los vientos y dijo a las olas: ― ¡Silencio! ¡Cálmense! Los vientos cesaron y todo quedó en calma,

40 Y Jesús les dijo: ― ¿Por qué tienen tanto miedo? ¿Acaso no tienen fe?

¿Podríamos decir que, en este primer ejemplo, no hay fe? , Ya que Jesús les está preguntando ¿acaso no tienen fe?

Ellos como discípulos atravesaban una dificultad, por eso tuvieron miedo y despertaron a Jesús. Puede que te encuentres en alguna situación así en tu vida, donde vez frente a ti una furiosa tormenta y te hace dudar; queriendo pedir ayuda, quizás llegando a pensar que Jesús esta dormido o que Él esta lejos de ti y por ello comienzas a dudar o no creer en esa FE que está dentro de ti.

El segundo ejemplo lo vemos en MATEO 6:30-33  NBV

30 Si Dios cuida tan admirablemente las flores, que hoy están aquí y mañana se queman en el fuego, ¿no los cuidará mucho más a ustedes, hombres de poca fe?

31 Por eso, no se anden preocupando por la comida o por la ropa.

32 ¡Los paganos son los que siempre se andan preocupando de esas cosas! Recuerden que su Padre celestial sabe lo que necesitan.

33 Lo más importante es que primero busquen el reino de Dios y hagan lo que es justo. Así, Dios les proporcionará todo lo que necesiten.

Aquí apreciamos que se habla de poca fe, ya que según el relato, ellos se preocupaban del mañana, sobre las cosas que vienen o lo que necesitarían, pero ¿ACASO  NUESTRO DIOS NO ESTA PREOCUPADO DE TODO EN NUESTRAS VIDAS?, es ahí el punto, muchas veces dudamos de lo que DIOS puede hacer o entregarnos y nuestra fe se ve débil, porque creemos mas en lo que nosotros como mujeres somos capaz de hacer, de lo que realmente el Señor puede hacer por y en nosotras.

Finalmente el último ejemplo lo leemos en: MATEO 8:5-10 NBV

5 Cuando Jesús llegó a Capernaúm, un capitán del ejército romano se le acercó y le rogó 6 que sanara a un sirviente que estaba en cama paralítico y que sufría mucho. 7 Le respondió Jesús: ―Iré a sanarlo.

8―Señor —le dijo entonces el capitán—, no soy digno de que vayas a mi casa. Desde aquí mismo puedes ordenar que se sane mi criado y se sanará.

10 Al oír esto, Jesús se maravilló y les dijo a quienes lo seguían: ― ¡En todo Israel no he hallado una fe tan grande como la de este hombre!

Con este lindo y profundo relato podemos ver una FE GRANDE. Aquel Centurión no dudaba quién era Jesús y lo que ÉL era capaz de hacer, solo le bastaba con SU palabra, y esto sería suficiente para que el criado fuera sanado.

¿No deberíamos nosotras creer de esa manera? Somos chicas que creemos en JESÚS pero muchas veces cuando enfrentamos alguna situación difícil, comenzamos a dudar de quien es ÉL y que es capaz de hacer en nosotras.

Quiero recordarte que nuestro DIOS es el mejor, los vientos le obedecen, Él sabe de qué tenemos necesidad  y solo una palabra de Él basta para hacer algo en nuestras vidas.

Amiga te animo a buscar e indagar en las escrituras día a día para crecer en FE y creyendo al DIOS maravilloso que servimos.

Ahora: ¿Puedes identificar Cuál es tu fe?

Escrito por Jennifer Reyes Arancibia.