¿Cuáles son los chicles que te han pegado?
¿Se imaginan en esta melena tres grandes bolas de chicle? Pues esto me ocurrió. Tenía 19 años me encontraba caminando hacia mi casa cuando sentí tres golpes detrás de mi cabeza y al mirarme vi tres grandes bolas de chicle que se mezclaban entre el cabello. Recuerdo que me sentí impotente, miré a mi alrededor y nunca supe quien lo hizo. Me dio mucha tristeza, no lograba entender nada de lo que me estaba pasando.
¿Por qué podría generarle yo a algún desconocido(a) tanto enojo? ¿Por qué querían dañar mi cabello? Hoy comprendo que en la vida podemos encontrarnos con personas tan averiadas que no disfrutarán de verte bien, bendecida y radiante. Si esto te ha ocurrido entonces te pido que no te culpes y que tampoco te quedes en la tristeza por el mal que te hayan hecho sino que pases por alto la ofensa, (después de haber llorado mucho), perdones y ores por los que quieren tu mal. La envidia es un sentimiento tan lamentable, que ya es suficiente castigo para el que la padece el que la padezca. Es un sentimiento autodestructivo y miserable.
Lo lindo fue que cuando llegué a mi casa encontré un hermano que le dolió mi dolor e hizo algo por mi para ayudarme. Tomó unos hielos y con mucha paciencia fue quitando uno por uno cada chicle sin que se cayera ni un solo pelo.
No se cuáles son los chicles que te han pegado para dañarte, tal vez no sean los chicles que se pegan en tu cabello sino los chicles que han querido dañar tu corazón, se que Dios proveerá un hermano que te ayude a desprenderlos de tu corazón con ternura y aprenderás a pasar la ofensa, a perdonar y a orar por el otro. Eso es lo que nos enseña Jesús.
Salmos 68:16
¿Por qué miráis con envidia, oh montes de muchos picos, al monte que Dios ha deseado para morada suya? Ciertamente el Señor habitará allí para siempre.
Por Johana Sarqués Plata
- Posted by Planeta Girl
- On noviembre 27, 2017
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