La pureza la desarrollamos cuando nos hacemos vulnerables, eso es cuando se lo contamos a alguien, es como presentarnos sin un protector de pantalla, tal y como somos que necesitamos ayuda. Sin tener nada que ocultar, que alguien sepa de tu vida.

Para los cristianos, la pureza es una orden directa de Dios. Nos han dicho repetidamente que debemos ser santos como Dios es santo, que debemos buscar lo que es puro, bueno, honorable y digno de Dios. El sexo es bueno y lleno de honra, cuando se encuentra dentro de los límites dados por Dios-un hombre y una mujer dentro del matrimonio, pero cuando lo sacamos de su lugar legítimo, se distorsiona lo que una vez fue puro y bueno, y nos quemamos en el proceso.

1. Comunión con Dios
2. No más concesiones, ni permisividad
3. Formar nuevos hábitos de pureza.

Colosenses 3:5 “¡Hagan morir todo lo que viene de la naturaleza pecaminosa! Apártense de los pecados sexuales, las impurezas, las pasiones bajas y vergonzosas y del deseo de acumular más y más cosas, pues eso es idolatría ”

El pecado, nos separa y nos desconecta de Dios. Podemos llegar a distanciarnos tanto de Dios, que sentimos que nuestras oraciones no están siendo escuchadas, ni lo serán.

La impureza nos hace amar el mundo, en el futuro nos lleva a odiar a Dios.

Debemos cortar por completo con toda impureza Mateo 18:8-9 “Por lo tanto, si tu mano o tu pie te hace pecar, córtatelo y échalo de ti, porque es mejor entrar al reino de los cielos mutilado que ir a parar al infierno con las dos manos y los dos pies.  9Y si tu ojo te hace pecar, sácatelo y échalo a la basura. Mejor te es entrar tuerto al reino de los cielos que ir al infierno con los dos ojos.”

Romanos 13:14. “’Más bien, revístanse ustedes del Señor Jesucristo, y no busquen satisfacer los deseos de su naturaleza pecadora.”

Hebreos 12:1  “Por eso, también nosotros, que estamos rodeados de tantos testigos, dejemos a un lado lo que nos estorba, en especial el pecado que nos molesta, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante”

¿Qué significa despojarse? quitarse por completo algo que nos hace tropezar.

Para correr esta carrera nosotros debemos quitar lo que nos enreda. Nuestros corazones continuarán siendo manchados si seguimos embriagándonos en la barra del demonio.

Charles Spurgeon decía “Los hombres viven en una persecución incansable de la satisfacción mediante las cosas terrenales. Ellos se agotan en los deleites engañosos del pecado, al final encuentran que todo es vanidad y vacío, quedando perplejos y muy defraudados, en una continua búsqueda infructuosa. Sin embargo, aunque cansados, ellos seguirán adelante tambaleándose bajo la influencia de la locura espiritual, y a pesar no ver ningún resultado, excepto la desilusión eterna, ellos insisten en seguir adelante. Ellos no toman ninguna previsión para su estado eterno; el presente los absorbe. Ellos prueban una y otra de las cisternas rotas de esta tierra, esperando encontrar agua donde hasta el día de hoy no se ha encontrado una sola gota”.

 La mayoría de los hongos crecen mejor en la oscuridad. Si expones un hongo a la luz, perderá su fuerza y su suavidad y posteriormente moriría.

La impureza es lo mismo; también crece en la oscuridad, los pecados vergonzosos los hacemos en secreto, donde nadie lo sabe, y mientras el pecado esté en la oscuridad, sin ninguna duda continuará.

Marcos 4:22“Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz”  

Hagamos preguntas: ¿Que dirían de ti si supieran lo que haces en secreto?, ¿Cómo quedaría tu familia si tu pecado fuera descubierto? ¿A quienes causarías dolor? ¿Cómo te sentirías sin la cobertura de Dios?

Estamos a tiempo de ponernos a cuentas con Dios

Isaías 55:6-7“Este es el momento oportuno para buscar al Señor. Ahora que está cerca es cuando deben llamarlo. Los que siempre buscan hacer el mal, que abandonen sus malos pensamientos y ese estilo de vida, y vuélvanse al Señor, pues él siempre está dispuesto a perdonarlos; el Señor es un Dios compasivo.”

Cuando das el giro de la pureza y te vuelves a Dios de corazón, hay una vida bendecida con satisfacción y alegría que se encuentra en Jesucristo.

En realidad, estamos dejando los placeres temporales y sin valor, por aquellos eternos y sublimes. Sí, estamos dejando los placeres del pecado, pero estamos ganando los placeres en Jesucristo.

Vive pura, recuerda que eres el templo del Espíritu Santo.