El hombre puede hacer muchos planes, pero la decisión final es del Señor. (Proverbios 19:21 NBV)

Faltan exactas 8 semanas para que finalice el año. Personalmente creo que ha transcurrido a una increíble velocidad, de hecho aún recuerdo la celebración de año nuevo, aquel 31.12.2019, cuando junto a mi familia y amigos esperábamos con ansias la media noche. Nos abrazamos, celebramos y oramos, presentando a Dios el año entrante.

Sin embargo podemos concluir en una unanimidad que este ha sido un año peculiar, el cual se escapó de toda planificación y organización posible. 2020 quedará impreso en nuestra memoria para siempre. Será el histórico año recordado por el virus que golpeó al mundo.

Sea cual sea el país o la cuidad donde te encuentres leyendo estas líneas, podrás acordar conmigo, que este año NO ha sido lo que tú y yo esperábamos, por el contrario, ha estado a kilómetros de distancia de todos nuestros buenos y sinceros deseos.

Meditemos juntas: ¿Qué has aprendido este 2020?

¿Cómo ha sido tu relación con Dios?, ¿Finalizas el año conocimiento más a tu Señor?

¿Te pareces más con Cristo?, ¿Cuál ha sido tu fruto este año?

Con estas interrogantes busco que puedas examinar tu caminar y corazón, con el objetivo que evalúes si tus ojos están enfocados en Jesús o en la tormenta que sacude al mundo entero.

Es muy fácil amedrentarnos y sucumbir ante la creciente incertidumbre mundial, ya que por todos lados se rumorea acerca de crisis políticas, económicas y de salud.

Pero ¿Dónde está edificada tu vida?, ¿En la aparente estabilidad que ofrece el mundo o en la roca segura que es Cristo?

Mi preciosa amiga, el Cielo NO está en Cuarentena, Jesús jamás entró en confinamiento y a Dios NO lo tomó por sorpresa la Pandemia.

Nuestro precioso y gran Dios continua trabajando en nuestros corazones y permitiendo que absolutamente TODO coopere para nuestro bien, la pregunta es ¿Te has percatado de esto? O ¿Has visto como tus meses transcurren entre quejas, lamento y llanto?

Como mencioné al inicio, aún quedan 8 semanas para finalizar el año, ¿Qué tal si te sacudes el desánimo, la frustración y la queja y decides confiar plenamente en Aquel que dijo que estaría contigo hasta el fin del mundo? (Mateo 28:20)

Con Dios NO negamos la realidad, ni esquivamos el dolor, en cambio depositamos en ÈL nuestra total confianza, por tanto creemos que Él no nos ha abandonado este 2020. ¡Amiga, Dios NO te ha abandonado!.

¿Qué tal si le agradeces por las pequeñas y simples bendiciones que has disfrutado cada día, cada semana y cada mes? (Por la vida, familia, amigos, iglesia, etc.). 2020 NO fue lo que esperabas pero ¿Y si enumeras todas y cada una de las misericordias y bendiciones que Dios entregó a tu vida y lo alabas por su obra en ti?

Que el próximo 31.12.2020 tus labios alaben a Dios y lo glorifiquen por todas sus obras y que tú profundo deseo sea aprender a confiar en ÈL, aún en el peor escenario mundial, aun cuando todo se derrumbe y gobierne el caos. Dios está sentado en su trono y nada se le escapa. Dios está en tu corazón y anhela continuar su obra en ti. ¿Lo crees?

Todos los que conocen tu misericordia, Señor, contarán contigo para que los auxilies, pues jamás has abandonado a quienes en ti confían. (Salmos 9:10 NBV0)

Escrito por Elizabet Cornejo Gajardo.