¡Bienvenida a la vida real!

Si te contara de las veces que he fallado en algo no terminaría. Todos empezamos con la idea de hacer las cosas bien y dar en el punto exacto para tener éxito o buenos resultados en lo que hacemos, sin embargo no todo se da de la manera en que lo pensamos y ahí es cuando debemos de iniciar el camino de la oportunidad y perseverancia.

¿Que hacer entonces después de haber fallado? Te comparto 3 consejos:

1-Valorar la experiencia: Cuando algo no nos sale como esperábamos, tenemos la dicha de conocer cómo «no hacer las cosas» la próxima vez. Pues precisamente la experiencia de aprendizaje es la que te lleva a hacer las cosas de una mejor manera. Por supuesto ¿Quién no desearía que todo saliera perfecto al primer intento? ¡Te aseguro que todos! Sin embargo, hay un gran valor en crecer por medio de las experiencias vividas.

2-Aprovecha las nuevas oportunidades: Creo que la mayoría de las veces el Dios de la vida te da una nueva oportunidad para tratar de nuevo; cuando esto pase debes estar lista. Así que no te quedes lamentándote por el pasado, llóralo si es necesario pero no permanezcas allí por mucho tiempo para que puedas tomar las nuevas oportunidades que Dios y la vida te dan. No sea que estén frente a vos y no te des cuenta por estar mirando atrás.

3-Persevera: Existe la posibilidad que volvás a intentarlo y falles de nuevo. En ese caso ¡Sigue! Sigue intentándolo hasta lograrlo. Sinceramente creo que muchos se quedan sin ver sueños cumplidos en su vida porque no quisieron perseverar y se quedaron estancados en sus errores ¡Por favor, no lo hagas! Todo aquello que vale la pena no es fácil de alcanzar, se necesita esfuerzo, trabajo, oración, fe y determinación. Y son precisamente estas cosas las que requieren de tiempo y perseverancia.

Los fallos son parte de la vida, por supuesto a nadie le gusta, y muchos de estos yerros tienen un alto precio. Sin embargo, vos no sos un fallo y solo eso te da el permiso y capacidad para empezar de nuevo, para probar una vez más que si lo podés hacer ¿El secreto? ¡Nunca te des por vencida! ¡Levántate y vuelve al camino que debes recorrer! Dios no soltará tu mano, no te soltés vos de la de El.

“Cuando uno se cae, se levanta; cuando pierde el camino, vuelve a él»

Jeremías 8:4 DHH

Escrito por Cris Acuña